dijous, 20 de febrer del 2014

CIENTÍFICOS ESPAÑOLES DESARROLLAN UN NUEVO MÉTODO PARA DETECTAR LEISHMANIOSIS

Fuente: el País, 18 de febrero de 2014
 
 
 
    Una muestra de pelo y un único análisis. Así de fácil resulta el nuevo método ideado por investigadores del grupo LeishmaCeres, de la Universidad de Extremadura, para detectar leishmaniosis. Una enfermedad parasitaria que afecta a más de 12 millones de personas, la mayoría en países empobrecidos, de las cuales unas 40.000 fallecen cada año por la variante visceral de esta enfermedad, según estimaciones de la ONG Iniciativa para el Desarrollo de Medicamentos para Enfermedades Olvidadas. La nueva técnica supone un ahorro importante respecto a los procedimientos habituales, que combinan varios métodos de elevado coste.
 
 
    "Esta técnica supone un notable ahorro de dinero, tiempo y personal sobre los actuales métodos de diagnóstico", explica Rubén Muñoz, autor principal del estudio. El diagnóstico habitual de esta enfermedad en animales salvajes combina varios métodos muy costosos para conseguir una mayor sensibilidad y fiabilidad en los resultados.
    La leishmaniosis se diagnostica a partir de muestras biológicas cuya obtención supone un grave estrés para los animales. "Para tomar muestras de sangre, piel o médula ósea en animales vivos hay que capturarlos y anestesiarlos", aclara Muñoz. En el caso de cadáveres, el análisis se complica ya que la lisis y putrefacción del organismo impide la detección de la infección parasitaria. “El nuevo método es tan sencillo como coger una muestra de pelo", asegura el científico. "El cabello es muy estable, lo que permite obtener, almacenar y transportar las muestras sin condiciones especiales", ilustra el científico.
 
    Los investigadores han podido comprobar la presencia de ADN parasitario en el pelo de perros, animales silvestres y ratones de laboratorio infectados. Resultados que Muñoz considera "suficientes para demostrar que el pelo de diferentes especies de mamíferos se comporta como un tejido especializado en el secuestro y eliminación del ADN de estos parásitos". El método de diagnóstico ha supuesto, por tanto, el descubrimiento de un mecanismo fisiológico, desconocido hasta ahora, de depuración y eliminación de sustancias tóxicas como el ADN de estos patógenos y, probablemente, de muchos otros.


dimecres, 5 de febrer del 2014

LA VERDADERA HISTORIA DEL SAN BERNARDO

Pregunta: raza de perro que se corresponde con el nombre de un santo.. Respuesta: San Bernardo, pero ¿Por qué San Bernardo? ¿De donde viene tan beato nombre para bautizar un can?


Para contestarla tenemos que viajar a Suiza y remontarnos muchos siglos atrás, concretamente al año 1050, y seguirle la pista de Bernardo de Menthon, archidecano de Aosta (Italia), que pertenecía a la orden del Císter, concretamente a los trapenses.

A 2.473 metros, entre Aosta y Martigny (Suiza), se encontraba el paso del Monte de Júpiter, un paso fronterizo que significaba una importante vía de comunicación europea (y, por supuesto, de contrabando). Por él a lo largo de los siglos pasaron personajes tan célebres como Barba Roja, Stendhal, Vittorio Emanuelle III, Alfonso XIII y el mismísimo Napoleón. Con temperaturas a veces de hasta  menos 20ºC y registros de cotas de nieve de 20 metros, la travesía no era precisamente pan comido y había muchas posibilidades de quedarse en el camino (de hecho todavía se conservan más de medio centenar de cadáveres que nunca fueron reclamados).

Aquí es donde aparece San Bernardo. Por aquel entonces, solo Bernardo, que decidió construir un hospicio para auxiliar a los viajeros, independientemente de que fueran ricos o pobres o de que sus intenciones fueran justas y pías o se tratara de bandidos. A él se le unió una comunidad de monjes, que los días de tormenta salía al rescate. Atendían a los accidentados, les daban comida caliente y les dejaban dormir bajo techo cubierto. En muchas ocasiones resultaba difícil localizarles debido a las avalanchas, por lo que los monjes comenzaron a servirse de los Barry dogs (como eran conocidos los San Bernardos entonces), de gran ayuda por su fortaleza y su sentido del olfato.
El hospicio consiguió salvar la vida de cientos de personas, y continuaría ejerciendo tal función durante siglos; tanto que finalmente el nombre del paso como la raza de perro se cambiaría por San Bernardo. 
A día de hoy la puerta principal sigue sin tener cerradura, de hecho, se dice que es el único sitio a más de 2.500 metros abierto 24 horas al día y los 7 días semana desde hace más de 1.000 años. Sus monjes siguen recibiendo a peregrinos o montañeros (que no tiene que pagar) y a viajeros, que vienen, esta vez sí, por propia voluntad, y duermen en dormitorios colectivos, por alrededor de 40 euros, cena incluida. También pueden participar en los servicios religiosos, que se celebran en la pequeña capillita, conocida como la “Sixtina de los Alpes”.
En el hospicio también se encuentra un pequeño museo que recoge la historia del lugar: desde los primeros vestigios arqueológicos de época romana a las colecciones botánicas y de minerales de los monjes, la biblioteca o una recreación de cómo eran las casas en la época… y, por supuesto, una parte dedicada a los perros, con el cuerpo de Barry III disecado, en el que se puede observar cómo ha evolucionado la raza. Sobre todo si luego se traspasa la siguiente puerta, la que conduce a las perreras de la Fundación Barry, donde viven 27 perras y 6 perros que son, en gran medida, los que se encargan de la preservación del pedigrí.
Actualmente la labor en la montaña de los San Bernardos ya no es tal. Ha sido remplazada por los helicópteros, pero, como tradición, uno de los cachorros es entrenado como perro de salvamento en caso de avalancha. El resto aprenden otras “profesiones”, y hacen funciones de cartero, mensajero, o son usados con fines terapéuticos, visitando casas, instituciones sociales o colegios en los que inculcan el respeto por los animales. También aprenden trucos y salen a pasear por la montaña con los niños que vienen a visitarles.
Solo queda ya la historia del barril... y no,  Barry no es diminutivo de barril y los san bernardos de la Fundación tampoco llevan uno colgando. Nunca ha sido así. Ni ahora ni en el pasado, porque, a pesar de la creencia popular, los médicos no recomiendan en absoluto darle bebida alcohólica a una persona con hipotermia. Una de las teorías del origen de esta iconografía es el cuadro Mastines alpinos reanimando a un viajero en apuros, de Edwin Landseer (1802-1873), donde, como nota de color el pinto añadió un barril a los mastines de montaña en cuadro. ¿Verdad o mito? intentaremos resolver esta duda en siguientes publicaciones! 

diumenge, 2 de febrer del 2014

GLÁNDULAS ANALES


   Las glándulas anales son dos pequeñas bolsas situadas en el interior del ano, a ambos lados, y son las responsables de producir un líquido maloliente y desagradable cuya función es lubricar las heces al salir y marcar el territorio con ese olor característico.

 
   Este marcaje facilita la comunicación e identificación entre ellos, por ello cuando dos perros se encuentran, una de las primeras zonas que se huelen es el ano.
   En un animal sano, estas glándulas se vacían regularmente de forma natural por el paso de las heces. También en una situación de miedo (peleas, accidentes, miedo intenso...) el animal puede vaciarlas (lo notaremos enseguida por su desagradable olor), con el fin de provocar un fuerte olor y confusión para poder escapar de esa situación.
   A veces, por motivos diferentes, como por ejemplo un cambio en la consistencia natural de las heces (ello puede afectar a la normal evacuación de los sacos anales), las glándulas se llenan en exceso, y el animal siente molestias y arrastra el culo por el suelo, intentando rascarse, se lame y muerde la zona anal. El dolor puede llegar a ser tan intenso que el animal puede rehusar defecar
   Si están muy llenas, podemos vaciarlas manualmente por presión, sujetando las bolsas entre el pulgar y el dedo índice (mejor si lo hacemos con un guante y un trozo de papel), masajeando desde delante hacia atrás, pero no dudes en preguntar a tu veterinario cómo realizar esta maniobra.


 
   No es aconsejable intentar vaciar las glándulas de manera preventiva en casa, ya que esto puede estimular la producción del material de excreción, irritando así una glándula innecesariamente.
   Cuando están muy llenas, a veces se obstruyen y llegan a formar abscesos, que incluso pueden llegar a necesitar cirugía. Estos abscesos se manifiestan como una hinchazón dolorosa que acaba rompiendo y dejando en la piel una especie de "cráter"  abierto al exterior.
   Una dieta equilibrada, junto con una desparasitación adecuada y la corrección de las causas que provocan este problema, son necesarias para solucionar o evitar que ésto ocurra.
   En el caso de que exista infección, pueden ser necesarios antiinflamatorios y antibióticos.

LA ORUGA DEL PINO O PROCESIONARIA

    Este insecto, es un lepidóptero nocturno (Thaumatopea pytocampa). Cuando acaba el verano, las mariposas macho fecundan a las hembras y éstas depositan los huevos en forma de cápsulas en las hojas de los pinos.
    Tras pasar varias fases del ciclo, se alcanza la fase 3 de larva, la que mejor conocemos porque se caracteriza por la construcción del nido (bolsa de seda) en el pino.
 
  
 
   Es a partir de la primavera, por la subida de las temperaturas, cuando las orugas del pino bajan por el tronco, en fila, formando una larga hilera (de ahí su nombre, porque parece que van en procesión), para poder enterrarse y formar las crisálidas (capullos de seda), que saldrán al final del verano siguiente como mariposas.
 
 
 
    Es éste el momento más peligroso para nuestros perros, pues el contacto de este insecto con la piel, provoca una fuerte reacción alérgica (dermatitis urticante) que puede tener consecuencias fatales. La localización más frecuente es la oral, cuando el perro intenta ingerirla.
    De los pelos de la oruga se libera una sustancia llamada "taumatopenia", que da lugar a la liberación de histamina, ocasionando una gran reacción inflamatoria.
 
    SÍNTOMAS:
 
    Veremos que nuestro perro presenta nerviosismo, constante deglución rápida, saliva de forma excesiva, se toca la boca con las patas.... En pocos minutos se puede llegar a incapacidad de cerrar la boca (debido a la inflamación), con angioedema, glositis (inflamación de la lengua) y cianosis de la lengua por dificultad del retorno venoso. La lesión local evoluciona a necrosis, perdiendo el tejido.
    Si no se soluciona, aparecen signos generales como disnea (dificultad para respirar), edema laríngeo (si ha ingerido pelos), hipertermia (aumento de su temperatura corporal), convulsiones y muerte del animal.
 
    TRATAMIENTO:
 
    Rápidamente acudir a un veterinario, donde le administrarán los fármacos necesarios. Cuanto antes se aplique el tratamiento, menores son las secuelas.
    Pero mientras tanto, podéis lavar la lengua con agua caliente (el calor desactiva la toxina). Nunca frotar la zona para no romper los pelos y que liberen más toxinas.